... noche.. día... tarde... noche... no entiendo por que el reloj siempre lleva esa urgencia de pasara al siguiente minuto, ¿Cómo disfrutar plenamente un segundo?... pienso que comienzo a  encariñarme con el limbo, es una dimensión difícil de compartir, de describir... dónde se vive en un sitio.. y se pertenece a algún otro lugar, un lugar que nos sabemos dónde finalmente quedo y que probablemente no existe... las manecillas del reloj no han dejado de funcionar, ¿Acaso no seden ante tal presión?....no estar aquí, no estar allá... pensaba en el último largo lapso de felicidad puro e inocente, si que ha pasado el tiempo... Ahora estoy aquí reconociendome y desconociéndome al mismo tiempo...